CADA SEGUNDO MUERE UN NIÑO POR MALARIA

"Es una tragedia monumental", dijo Ban Ki-moon desde Naciones Unidas. "No hay excusas para no intervenir". La inversión para combatir el paludismo es mínima. Este miércoles es el día mundial de la enfermedad

Más de 1.400 niños mueren cada día en el mundo a causa de la malaria, una enfermedad que transmite el mosquito Anopheles. Por eso Naciones Unidas califica la situación de "tragedia monumental": son vidas que se podrían salvar con el interés internacional.

El hecho de que la enfermedad incida sobre todo en menores se debe a que su sistema inmunológico está "más debilitado" respecto al de los adultos, que seguramente han sido picados varias veces por el mosquito que provoca la malaria, pero han establecido al final una inmunidad natural.

La malaria está causada por la infección del parásito Plasmodium, transmitida por el mosquito Anopheles. Los afectados por la enfermedad sufren una fiebre elevada e intensa y fuertes estremecimientos, como si tuvieran frío.

Para el desarrollo de la malaria son necesarias más de 50 picaduras anuales por el mosquito infectado, el cual inocula una cantidad de plasmodios que se reproducen en el hígado y los glóbulos rojos del sujeto parasitado.

De las aproximadamente 3.000 millones de personas que viven en algunos de los 103 países endémicos, 243 millones desarrollan anualmente paludismo sintomático, y de éstas, 860.000 morirán, el 80% de los niños del África Subsahariana.

En la víspera del Día Mundial contra la Malaria, el secretario general Ban Ki-moon consideró inaceptable la alta mortalidad a causa de esta enfermedad.
"Sigue siendo una tragedia monumental que cada segundo que pasa muera un niño a causa de la malaria, pero podemos ver cierta esperanza en las muchas vidas que se han salvado gracias a las intervenciones internacionales", señaló Ban en su mensaje.

El secretario general destacó que la prueba de que se puede hacer algo se ha dado en años precedentes. Desde el año 2000, las tasas de mortalidad por la malaria han caído más de un 25 % en todo el mundo y más de un 33 % en África. "Estos esfuerzos han salvado más de un millón de vidas, dijo Ban Ki-mon.

Para Naciones Unidas, el objetivo es llegar a "cero muertes por malaria" en 2017. Ban subrayó que "en este mundo de abundancia no hay excusas para intervenir e invertir de manera inteligente", porque un examen de diagnóstico rápido cuesta unos 50 centavos de dólar, los medicamentos contra la malaria en torno a un dólar y una mosquitera para varios niños con una duración de tres años unos cinco dólares.

El secretario general de la ONU hizo un llamamiento para cubrir la totalidad de la financiación de 3.200 millones de dólares necesaria para lograr y mantener una cobertura universal en África.